Araña

Siempre que se me acaban los temas para escribir, echo mano de mis hermanos, de los que guardo miles de anécdotas, algunas buenas, otras no tanto

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Llegó a casa hace hace 28 años exactamente a la 1:30 de la tarde, yo estaba acostado, cuando lo trajeron.

Todo el tiempo que pasan cosas importantes recibo la noticia acostado, será porque paso mucho tiempo acostado, dormido o leyendo, bueno y ya desde la tierna edad de 6 años dibujaba en la cama, hasta que me compré una mesa, y ahora un restirador que rara vez uso.

Fue todo un acontecimiento la llegada del bebé, como pasa en esos casos desfila la familia para verlo, y vino una tía a pasar días para cuidar al nene.

Era un niño ruidoso, que si no estaba riendo estaba llorando porque alguno de sus hermanos le hizo algo, una mueca, o una broma, así, desde mucho antes del año en que aprendió a caminar dio guerra, a los tres años aprendió a andar en bici y a patear un balón, una pena que a pesar de estar en kinder privado no aprendió a leer y escribir bien hasta la primaria, pero sabía muchas palabras en inglés y en español. Desde niño fue bueno para los idiomas, malo para los números, regular para las letras. Pero excelente para el futbol.

Esa tarde de 1986, año del mundial en México, hacía calor y tampoco hubo clases, era una ventaja haber nacido en día feriado porque 10 años seguidos tuvo fiesta de cumpleaños, y creo que año tras año lloró cuando lo embarramos en el pastel.

Con la cara roja de llorar el bebillo nuevo estaba ahí en la cama, siempre le hicimos la broma que llegó envuelto en periódico. Pero no es verdad, ahora lo aclaro.

Y así creció con balón en mano, se apropió de las risas de la casa, Chencho (nuestro Padre) le llamo “la bala”, de Juana fue el consentido, nosotros en clave le pusimos “El Tonka”, yo siempre le digo “Araña”, porque había que bajarlo de bardas, techos, armarios, mesas y muebles; aprendió a vivir en la calle y a patalear todos los días cuando lo arrastrábamos para meterlo a dormir.

Que más puedo decir del famoso ´Chalito´, que todavía la semana pasada caminando por la calle el “Ravel”me preguntó por el juanillo, y así seguido me preguntan por él y eso que ya existe facebook.

Pero hoy solo quiero desearle lo mejor en su cumpleaños, que no deje de perseguir su sueño, yo espero un día abrir el portal de noticias y ver que el nuevo entrenador del Bénfica, el Nápoles, incluso el Madrid o el Barcelona sea Juan Carlos Martínez. Es bueno que sepa que nada de eso es magia ni casualidad simplemente es un camino que hay que recorrer.

Y así, se quejó alguna vez porque no lo he dibujado, pero rescaté hace semanas una de mis primeras viejas pinturas al óleo, entre un montón de papeles viejos y húmedos.

Aquí se los dejo.

Foto: "Oleo de niño con uniforme" Jomagú 1989

Viajar

No está de más de vez en cuando conocer Nueva Delhi, o Bangkok, ciudades complejas, ver la muralla China, andar por Europa del Este pero…

Edimburgo

Cuando cursaba el cuarto grado de primaria, mi maestra de entonces, rubia, alta, fina, _una ‘barbie’ pues_ aunque con mal carácter; se embarazó y pidió días de descanso más o menos por estas fechas creo recordar. La sustituyó el profesor Armando, no era alguien del todo agradable y hablaba como cortado, así como el gato Silvestre; nada más llegar al salón de clase empezó a hacer preguntas, uno a uno inquirió, qué quieres hacer cuando crezcas era una de las preguntas, siempre me puso nervioso ese tipo de actividad en los salones de clase, pero mi respuesta fue clara “viajar y conocer el mundo”.

No tengo nada contra quienes han estado en muchos países, ciudades, lugares; más en estos años donde de todos los viajes se entera uno por las redes sociales, la crítica va en el sentido que vas a lugares remotos, un día, dos, una semana a lo mucho, y qué traes un llavero, una foto, un bonito recuerdo, alguna mala experiencia y nada más.

El profesor Armando, buena gente, cómo eran antes los maestros, contestaba cortés a cada uno, tengo presente lo que me dijo esa vez: ¿quieres viajar y conocer el mundo?, lee libros.

Aquí pocos me van a discutir, pero casi puedo decir que conozco la calle calle Götgatan, sé la vista que tenía uno de los departamentos en los que vivía Lisbeth Salander, de la serie «Millenium», o puedo saber del ‘7 eleven’ donde compraba su pizza congelada, o su café y muchos detalles más esto sin haber nunca viajado físicamente a Estocolmo, Suecia.

De igual forma Seattle se puso de moda con los libros de ’50 sombras de grey’, el perfil de la ciudad descrito claramente, el vuelo en helicóptero, los lugares donde vivía Ana, la carretera de ida y regreso a la ciudad, la vista al bajar del paracaídas y cosas de esas.

Tuvo razón el profe, al decir eso de leer libros es viajar, a lo que voy es que no está de más de vez en cuando conocer Nueva Delhi, o Bangkok, ciudades complejas, ver la muralla China, andar por Europa del Este, y aún tengo la inquietud de conocer.

Pero leer libros va más allá, no solo conoces lugares, caminas en ellos, lugares que muchas veces no existieron más que en la mente de escritor, puedo decir que conozco la Francia de “El Día del Chacal”, el Lóndres mágico de la serie de Harry Poter, y no precisamente por las películas, el Edimburgo o Lóndres de Robert Louis Stevenson, en su clásico «El extraño caso del doctor Jekyll y Mr. Hyde», no me quedó claro en qué ciudad era, pero era oscura con toda esa gente viviendo abajo de los puentes y túneles.

Qué decir del París del Jorobado de Notre Dame de la novela de Víctor Hugo; Macondo de “Cien Años de Soledad”; eso pasa cada ves que leo una buena novela con sus lugares, reales o imaginados, bien descritos, eso cómo si hubiese estado ahí. Eso es leer.

Así, cuando alguien me pregunta que si a donde he viajado, cómo contestarle que he estado en la tierra media de la trilogía de “El Señor de los Anillos”, y de “El Hobbit”, Italia y Nueva York de “El Padrino”.

Aunque después de haber leído la trilogía de “La Fundación” con Trántor y otros 10 o 20 libros de Isaac Asimov, ya nada fue igual.

Y no, no cambio por nada caminar en la nieve en Colorado, o por las atestadas calles del Centro histórico de la Ciudad de México, aunque fuera solo un ratito.

Felices vacaciones a todos.

El día del Chacal

Texto publicado en 2011 en un suplemento, lo encontré entre mis textos y quise compartirlo…

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Hoy no toca hablar de las tres lecturas que hayan marcado mi vida, aunque cada lectura que alguien hace le impacta en menor o mayor medida, no por nada dicen por ahí que somos lo que leemos, o en otro caso, lo que no leemos, aunque no se necesita haber leído una biblioteca completa para ser una persona educada, pienso que los libros sí abren el horizonte y entretienen a quien tiene el gusto por leerlos. Aunque no he leído la biblia, ni a Conan Doyle con su Sherlock Holmes, y me apena decir que tampoco he leído El Quijote, hay un libro que nunca me canso de recomendar, El Chacal, o El Día del Chacal, del escritor Frederick Forsyth, y no es por su aportación a la cultura, ni por su tradición, ni siquiera estoy seguro que sea uno de los clásicos, lo que sí es una traducción y mi gusto por esa novela es por cómo se organiza la trama y la minuciosidad con la que es relatada y compuesta la historia, no deja de impresionarme aún después de la tercera lectura que le he dado. Alguien podría objetar que es un libro extranjero, que las malas traducciones hacen mucho daño al lenguaje, y sí, podrían tener razón, no obstante un buen libro aunque sea una mala traducción destaca. Forsyth fue periodista de ahí que los hechos que maneja se relatan con frialdad de una realidad simulada, aunque al paso de las páginas no dejo de pensar que en lugar de leer una novela parecería que leo una crónica periodística, vista desde varios ángulos. La novela en sí es impecable de principio a fin, trata sobre un atentado al general de Gaulle, presidente de Francia en la época de los 60´s, el autor trabajó para la agencia Reuter, y en aquel tiempo cubrió los viajes del mandatario francés, por lo que deja la sensación y la idea de que la novela pudo ser verdad, o de si el autor mezcló hechos reales con ficción. Tal es mi recomendación, aunque como siempre digo, cualquier cosa que se lee, si se lee por gusto es buena lectura, y aprovecho también el espacio para desear a todos los lectores del suplemento Palabra y Periodico El Vigía unas felices fiestas. Jorge Martínez, invierno de 2011.

Dentro…

La pintura es para todos, lo público; el dibujo es mío, soy yo, lo privado.

En la pintura miento, en el dibujo no; el pigmento que cubre las líneas, el odiado plástico que adorna esconde; la pintura me oculta y me aleja de todo.

El trazo vivo, el fluir del grafito, de la tinta sobre el papel es lo que me define, me muestra y me descubre.

Si quieres conocerme o me quieres ver, observa con atención los dibujos, trata de mirar lo que hay debajo de las pinturas y ahí estoy, espero estar ahí aún cuando ya me haya ido.Imagen

100 eventos que recordar y celebrar del 2012

Antesala a la otra vida, o a la nada.

De Imágenes de Blogger

La respuesta a qué hace una sofá de una sala en mitad de una carretera es irrelevante cuando conduces a más 100 kilómetros por hora, lo arrollas y el vehículo sufre una aparatosa volcadura.

En el radio sonaba la canción “Qué será” interpretada por José Feliciano, la niña, en su silla en el asiento trasero juega con el ipod al tiempo que pregunta:, ¿papá vienes cantando?, me sonrío y es en ese momento cuando aparece el sillón enfrente de la camioneta.

Después del accidente al salir con la niña por la ventanilla de atrás del vehículo ayudado por personas que se acercaron, supe que todo había quedado atrás… que la pequeña y yo somos afortunados, y los Mayas casi tuvieron razón, lo demás ya es historia.

En este inicio de año, en recuento del pasado, y del presente no puedo menos que estar esperanzado a lo que viene, seguro y confiado de haber tomado el camino largo de la vida.

Todo el tiempo aspiré a más, a hacer algo útil por los demás, algo notorio y pienso que en la arquitectura daré eso, elegí _a mi edad_ el camino de ir a clases todos los días, y sé me espera trabajo hasta lograr hacer algo relevante.

La arquitectura es una carrera de todos los días, de muchas facetas, de muchas horas de dedicación y no ves resultados palpables hasta mucho tiempo después, que sea este un tranquilo año, bueno, no tan tranquilo.

Hay estar preparado para todo y mientras festejar por las cosas buenas y las no tanto.

1.-Por todas las personas que nos quieren y se preocupan.
2.- Y las que no también, paz a todos por igual.
3.- Por el incidente, el sillón en la carretera y la destrozada camioneta de mi hermano.
4.- Porque alguien tiene que pagarlo, a pesar todo el papeleo.
5.- Porque en todo el año no pisé hospitales, ni consultorios salvo para vender publicidad, y visitar familiares ah y llevar a Italia al pediatra.
6.-  Por École que por fin despuntó, que así siga.
7.- Por otro año con más risas que lágrimas.
8.- Porque el dinero sí es importante, y no es cliché.
9.- Porque he tratado de dejar atrás los clichés, sin lograrlo claro.
10.- Por la no-fiesta del tercer cumpleaños de Italia.
11.- Por el fino pulso de Pikiki y su ambición de pintar “como papá“.
12.- Porque le encanta ser chef “como mamá y abuela”.
13.- Y porque Italia descubrirá que hay millones de vocaciones y equivocaciones.
14.- Porque dejé limpio mi escritorio en El Vigía.
15.- Porque no fui invitado a la fiesta de ex trabajadores del periódico, supongo lo olvidaron, o fue extraoficial.
16.- Por el nuevo título del Real Madrid, y los manejos de José Mourinho.
17.- Y porque le dio unas buenas lecciones a los de la banda azulgrana y por la salida de Pep.
18.- Por el triunfo de Xolos y porque fue ante el “odiado” Toluca.
19.- Por el matrimonio de Karina y Noé.
20.- Porque Galia se unió a la fiesta.
21.- Porque Italia sigue en Ourgarden.
22.- Por la lasagna vegetariana de Cristina.
23.- Por los pasteles de Juliana, nuestra vecina.
24.- Por el menudo de la suegra, abuela de Pikiki.
25.- Y también por el pozole de Santa
26.- Otra vez por el otro fabuloso pastel de calabaza (de las de halloween  ) de prima Hayde.
27.- Porque mis días de comer carne tocan su fin.
28.- Por los supuestos estragos del café, de los cuales tengo mis dudas.
29.- Porque por fin entregué el cuadro gigante de casi 4 metros cuadrados.
30.- Porque resultó como esperaba.
31.- Por mi nuevo pasaporte, el vencimiento y renovación de mi visa de los EU.
32.- Por las conferencias de Tijuana Innovadora y la visitas al Cecut.
33.- Porque abrieron periódico Frontera en Ensenada.
34.- Porque llegó Milenio a Baja California.
35.- Y porque Lorena volvió a reportear, a lo que es su tortura y su vida.
36.- Por toda la joyería que vendió cada difícil día.
37.- Porque mi compa el Verny estrenó casa propia.
38.- Por las remodelaciones en casa, y las que faltan.
39.- Porque recuperé mi libro de ventas.
40.- Porque Kirry, el gato, se unió a la fiesta (sin ser invitado por mi).
41.- Y porque hubiese preferido por fin comprarle a Italia su oveja eléctrica.
42.- Porque Ridley Scott no la regó con la precuela de Alien sino todo lo contrario.
43.- Por el excelente cierre de la Trilogía del Batman de Nolan, lástima de lo de Aurora.
44.- Porque por fin supe lo que es tener vacaciones dentro de las vacaciones dentro de las vacaciones y salí de ello, creo.
45.- Por la peli de “El oso Ted”, y porque no se le ocurrió a alguien antes.
46.- Por la nueva fachada en la casa de la Indeco.
47.- Porque aprendí de urbanismo y diseño del paisaje, pero mas de diseño editorial.
48.- Porque sigo sin saber de diseño de interiores, mejor dicho interiorismo.
49.- Porque vendí más pinturas de las esperadas.
50.- Por el vicio en Angry Birds que me costó retrasos en el trabajo y en la escuela.
51.- Por la crisis europea y la restauración del Ecce Homo.
52.- Por los cambios de presidente, y la reelección de Obama
53.- Por los berrinches del Peje y sus seguidores.
54.- Por el adios al Hotmail, al messenger y la hegemonía del facebook.
55.- Por los proyectos de diseño, el Prar y todo lo que quedó esperando.
56.- Por mi ensayo en la materia de Urbanismo.
57.- Y el post de “La Ciudad de la Oscuridad”.
58.- Por el jardín nativo y el Sudoku.
59.- Porque pude sacarle provecho a lo aprendido de Revit.
60.- Por Bukowski el grande y sus grandes frases, sus novelas y su poesía.
61.- Por el paseo en la Joya SD, y la casa de ensueño del vecino de Depak Chopra.
62.- Por el pastel de zanahoria de mi cumpleaños sin facebook.
63.- Por las elecciones y las marchas antes durante y después de la votación.
64.- Por el teatro de la municipalización de San Quintín y el malogrado proyecto de Punta Colonet.
65.- Por los 10 millones de pesos de los “paradores turísticos” en la Ruta del Vino.
66.- Ah y por la cacareada del bulevar Enlace 2000 y la desaladora.
67.- Por los “130 años de história de Encenada” del Frontera, y por la “Hera del Hielo” también.
68.- Por las vacaciones y el paseo en jirafa de Italia, promesa cumplida.
69.- Por los “pies”, (léase pays), del Morris, deliciosos por cierto.
70.- Porque el Jetta por fin dio problemas mecánicos verdaderos.
71.- Porque sigue andando.
72.- Y porque sigo sin ver la película de ET, ni leer El Quijote ni la Biblia.
73.- Porque por fin pude ver las cuatro temporadas de Breakin Bad.
74.- Por el triste fallecimiento del profe Ascencio, descanse en paz un buen maestro.
75.- Porque falleció también la tía Victoria.
76.- Porque se fueron Carlos Fuentes, Chavela Vargas, Michael Clark Duncan, Whitney Houston.
77.- También Julio Alemán, el “macho” Camacho, Donna Summer, ah y Jenny Rivera, descansen en paz.
78.- Porque no pude ver la nueva cinta del 007 (Skyfall)
79.- Por la peor película del año, el final de los vampiros de “Amanecer”.
80.- Porque sigue creciendo la familia allá por Villa Colonial, Denver, Los Ángeles y Zacatecas.
81.- Por el libro de la biografía de Steve Jobs, una de mis más relevantes lecturas.
82.- Porque por fin compre el Neufert, en lugar de regalarme mi playera del Madrid.
83.- Por el Koky y el Isaac, el Ivan y el Roger, mis equipazos de estos dos últimos semestres.
84.- Porque no, por el Morris y el Steve, y porque pudimos haber hecho más.
85.- Por el conciertazo de La Arrolladora, lástima que no me encanta bailar.
86.-
87.- Porque no pude ir a ver “El Cerdo” con Jesús Ochoa.
88.- Ni siquiera cuando vino a Ensenada.
89.- Por la amena charla de Alberto Salcedo Ramos, en el vestíbulo del El Cubo en Cecut, Tijuana.
90.- Por “Kid Pambelé” y la “Eterna Parranda y las verdaderas crónicas periodísticas.
91.- Por la nueva visita al Museo Getty y fabuloso café con el ‘mufin’ de platano en ese agradable espacio arquitectónico.
92.- Porque volví a perderme las conferencias del día del arquitecto.
93.- Por el regreso al departamento de publicidad y las reuniones de los lunes a las 8:30.
94.- Por los mapas de Proturismo.
95.- Porque los números generadores, precios unitarios me parecieron difíciles.
96.- Y porque ya después de dos licitaciones documentadas poco queda de miedo a la ingeniería de costos.
97.- Por las madrugadas en que Italia despertó a comer y sus primeras pláticas lúcidas.
98.- Porque Italia sigue teniendo esa fascinación por los robots y las máquinas.
99.- Por los préstamos en efectivo del Skynny, y sin intereses. Gracias man.
100.- Por los que se fueron de nuestras vidas, por voluntad o porque los enviamos a la…
101.-  Por los que siguen y los que vienen, bienvenidos. Aquí estamos.

LOS ‘SOUNDTRACK’

Música que me ha acompañado en momentos de la vida…

No recuerdo en qué momento tuve conciencia de que la música existía, supongo que como la mayoría desde pequeño estuve sujeto a escuchar lo mismo que los mayores cercanos, ya después tuve opción de diversificar mi gusto musical.

De Contexto

Nada del otro mundo

Enlisto algunos de los cantantes y música que he escuchado en distintas etapas, desde luego que hay muchas, pero hay algunas que más recuerdo.
Y no, no me avergüenza (como a tantos), decir que escuchaba a Vicente Fernández de niño, ni a Luis Miguel en finales de la secundaria e inicios de la preparatoria, de hecho en aquella época el disco “Romance” fue lo máximo. Todavía a veces abro esas carpetas de música y me pongo a escuchar.
Tigres del Norte, Banda El Recodo y Ramón Ayala, forman parte de una época que ya sea por las estaciones de radio en el transporte público, o la música en casetes que estuvo a mi alcance.
Ya liberado de esas influencias, a mediados de la preparatoria me llegó la época de “El negro cósmico” de Caifanes, del disco “El Diablito”, mi época del rock en español, se completó mucho después con las Mil Horas y Flaca del repertorio de Andrés Calamaro y hasta ahí.

Los soundtrack

En sí, “Paperback writer” de The Beatles me recuerda el par de meses que estuve en ingeniería electrónica, una época que he pretendido hacer como que no existe pero ahí está.
Si mi vida fuera una película y hubiera que hacer un ‘soundtrack’, “Penny Lane” seguro estaría, era mi favorita cuando abandoné la escuela de ingeniería; lo decidí una tarde en clase de computación y quien diría que volvería a estudiar arquitectura casi 20 años después a esos mismos jardines y pasillos.
Escuchaba “Smell like teen spirit”, sencillo del disco Nevermind de Nirvana, en mis inicios de la carrera de ciencias computacionales, recuerdo las intensas horas de programación estructurada y orientada a objetos, largas madrugadas en la casa que rentaban unos compañeros en la calle Blancarte entre Juarez y Sexta.
Se hacía de día revisando líneas de código, programando y comiendo chocolate oscuro y bebiendo café sin azúcar, (todavía no había Red Bull y esas cosas que existen hoy), siempre evite fumar pero de haberme gustado, ahí con música de Nirvana hubiese empezado a dañar mis pulmones.
Por esa época 1994 y 1995, gracias al invento el mp3, pude conocer la música de Mozart y mucha de la música clásica que sólo podía disfrutar en películas, por ese tiempo también pude escuchar algunas canciones de Silvio Rodríguez y Luis Eduardo Aute pero todavía me quedaban holgadas sus letras.
Más adelante, luego que finalicé la licenciatura en computación, las 9 sinfonías completas de Beethoven, en la época de la bohemia, la literatura y las artes visuales, fue cuando todo lo que había venido buscando cuadró.

De Contexto

1991, Out of Time

Siendo más específico con ‘mi música’, fue allá por el 1987 u 1988 cuando mi tío Ismael me regaló tres casetes originales, Signos, de Soda Stereo; Introspective, de Pet Shop Boys y una compilación de Mixes de Hombres G; Soda Stereo de plano no me gustó, a mi vez yo regalé el cartucho a un amigo que hasta la fecha espera el regreso de Gustavo Cerati.
El disco de Pet Shop Boys, con Domino Dancing y todos los sencillos abrieron en mi un nuevo mundo musical, con el disco de Hombres G, puedo decir de paso que ahí empecé a conocer Madrid a través de David Summers y su grupo, con sus películas y el futbol y hasta la fecha no se me ha hecho viajar por aquellos lugares, pero no pierdo la esperanza de conocer el estadio Santiago Bernabeu.
Llegó un momento en que tuve mi primer carro, un Datsun 200SX, con ello llegó Imagine de John Lennon y la nostalgia de poder ir y estar en cualquier lugar de la ciudad escuchando música.
Allá por finales de 1990, era toda una novedad el estéreo con disco compacto, y el disco de R.E.M. Out of Time fue uno de los primeros CD´s que escuché ahí, cómo olvidar la canción Shiny Happy People, que me evoca esa adrenalina de conducir a escondidas y aún sin licencia. Y el cómo tomé literal eso de “Losing My Religion”.

De Contexto

Lejos de la ciudad

‘Eye on the sky’ de Alan Parsons Project cuando pase unas largas vacaciones en Los Angeles a finales del milenio.
En el insípido nuevo siglo la canción Yellow de Coldplay me recuerda a cuando caminaba en las frías y solitarias calles de Denver, entre la nieve escuchaba también Foreigner cuando amanecía leyendo los libros gratuitos de la biblioteca pública.
“I Want To Know What Love Is”, me trae memorias de mis solitarias horas de pintura en Denver.
“Under de Bridge”, fue un accidente, encontré este archivo en un disco duro al que recuperé los datos en los 90´s, luego ignoré a los Red Hot Chilli Pepers hasta que llegó Stadium Arcadium, que no me cansaba de escuchar durante las jornadas de ocho largas horas primer empleo formal.
Luego llegó de manera oficial Intemperie de Luis Eduardo Auté, Silvio Rodríguez con Segunda Cita, pero esas son parte de otra historia.

De Contexto

En estos días

El letargo de las 40 sinfonías tempranas de Mozart durante el embarazo de Lorena y nacimiento de Italia. La “biblioteca de clásicos” sonando mientras en las intensas horas haciendo maquetas o proyectando en la carrera de arquitectura.
Y en estos días escucho una y otra vez “la rata vieja”, y una tonadita en francés (Sur le pont d’Avignon) y una sobre “la foca Mumata”, la del elefante “Trompita” y la clásica “el muñeco Pimpón”, que canta Italia mañanas tardes y noches. Aunque puedo con gusto decir que la canción “Allí” de Luis Eduardo Aute, es su canción favorita, y una de las mías también.
Así está esto.

Todo trata de soluciones

Cuando tengo un problema…

De Albumes de Jomagú…

en la primer persona en que pienso que me puede ayudar es en Lorena, mi esposa, muchos de mis problemas con ella acaban y soy feliz. Pero si ella no pudiera ayudarme pienso de inmediato en mis hermanos, el ingeniero o el informático, si está en su ramo puedo asegurar que darían su mano derecha por ayudarme, o el Araña si es algo deportivo, metafísico o de autos, aunque él tiene una solución para todo; cuando ellos no pueden darme su apoyo o no está en sus manos resolver mi urgencia, pienso en un amigo abogado, o un doctor según sea el caso. Sucede a veces que ni ellos pueden, acudo entonces a un padrino empresario que tengo, o al tío mafioso o al primo político, dependiendo. Aunque si esto luce muy muy complicado llamo a mi papá, Chencho, que nunca en la vida me ha dejado en mal. Y si sucediera, que ni él puede, entonces ya puedo pensar en tratar de resolverlo yo mismo de una vez por todas o, tal vez con la ayuda de una amiga psicóloga, me de cuenta que el problema sea yo; y si nadie puede ayudarme, todavía pienso en replantear el problema, y si llego a la conclusión de que el problema no tiene solución deja de ser mi problema. No obstante si yo soy parte de la solución la dejo hecha por si surgiera alguien más que quiere resolver el problema del cambio climático y la destrucción del mundo, la acumulación de basura, dotar de energía limpia al mundo o el cambio de México vea que no está solo.

Así es esto.

El oro de la actualidad ya no es el tiempo si no la atención

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Es perfectamente posible que una persona produzca lo que antes producían tres, pero no se le paga tres veces más por lo que esta persona puede sentirse frustrada y menos productiva que nunca, y termine por buscar otra ocupación.

Cuando realizas al día hasta tres jornadas laborales en distintos campos de ocupación, tienes que ser capaz de estar presente, no distraerte, confiar en tu sabiduría interna y tomar decisiones rápidas incluso sin ayuda de otros o sin tratar de alcanzar la perfección.

En cambio se tienen otras áreas en las que por tu criterio, confianza y habilidad en lo que haces, todo tiene que quedar perfecto, aunque sea un producto para otra persona o personas que saben apreciar ese tipo de trabajo, no les importará esperar el tiempo que sea para obtener eso que algunos llamarían obra de arte, o un trabajo bien hecho.

También habrá quienes de ninguna manera aprecien ese esfuerzo.

Con tantas cosas en mente a veces es imposible entre la bruma de pensamientos abstractos como las formas en la construcción, y ocupaciones cotidianas como ir a llenar un garrafón de agua o pagar la cuenta de la electricidad, esto sin contar el tener el tiempo necesario para relatarle a tu hija pequeña un cuento en plena madrugada, incluso en el día tener un momento para entrar en su mundo fantástico y salir ileso.

Estoy aquí tratando de responderme a todo esto.

A veces me preguntan si estoy enfermo porque me quedo estático viendo la nada, especialmente en lugares frescos y bien ventilados, pero no, simplemente estoy desenmarañando mis pensamientos, desechando los que no son importantes y calibrando lo que vale y lo que no vale la pena hacer.

Cada noche me toma más de 45 minutos conciliar el sueño armando una agenda mental de lo que será mi día siguiente, ya que hasta las labores cotidianas más simples que hay que realizar pueden ser importantes para alguien más.

Mi atención es uno de los recursos más importantes que poseo, así que si no lo aprovecho de forma apropiada y le doy un par se horas semanales de descanso, (mirando el futbol por ejemplo o leyendo algo que ya leí), corro el riesgo como me ha pasado otras veces de perder el control y alzarle la voz a alguien que tal vez no lo merece sólo porque le toco derramar el vaso.

Escribir sobre las cosas que hiciste o las que tienes que hacer te clarifica las ideas.

La turbulenta realidad a que el humano está sometido en la actualidad lo obliga a tomar control de sí mismo, de su tiempo y de su espacio.

Aunque siempre existirá el riesgo de quedar ‘muerto el vida’ cumpliendo tu horario de 9 a 3 y de 5 a 7.

Preservando la cultura

Si música, películas y libros estuvieran disponibles gratis en Internet ¿quién pagaría a los artistas y creadores?

De Jomagú

Voy a hacer una cuenta hipotética, supongamos que tengo en mi computadora 200 películas, 10 mil canciones, y unos 500 libros digitales, material que es más o menos, lo que he leído en los últimos 5 años en papel, y cintas que he visto en el cine o video y canciones que de una manera u otra he escuchado. Esto sin contar videojuegos ni programas informáticos.
Ahora, ¿a cuanto dinero ascendería todo esa información si lo hubiera comprado en Itunes o Amazon?, el monto asciende a más dinero de la hipoteca del Infonavit que estaría pagando durante 25 o 30 años.
Hay que ver que en Apple o Amazon venden cada canción cuesta 99 centavos de dólar, cada película de 9.99 a 15.00 dólares comprada, ó 3.99 la renta y cada libro entre 13.99 y 19.99 dólares (si no son de arquitectura o diseño). Sólo son números.
También hipotéticamente voy a suponer que soy un trabajador mediano de un empresa no muy grande, digamos que gano unos 3 mil pesos por quincena, ya libres de impuestos y demás descuentos por seguridad social y otras deducciones de créditos y cosas de esas, que aún así es poco para lo que cuestan las cosas, pero como mi caso es ficticio, continúo.
Este texto lo escribo gratis, y si alguien escribe es para que lo lean, si hace música es para que sea escuchada, si un director hace películas mínimo espera tener buena audiencia, si todo esto estuviera disponible gratis en Internet ¿quién pagaría a los artistas y creadores?, ¿quién me paga a mi el trabajo que me gusta hacer?.

Cultura es que todos paguemos

Pensemos que la nueva canción de Bono la bajan unos seis o siete mil millones de humanos, si todos pagaramos un euro o un dólar por dicha obra, para quien serían esos siete mil millones, ¿para Bono?.
Si a mi me gusta leer mucho, me gusta mucho ver películas, me gusta mucho oír música, pero tengo un ligero problema, no tengo tanto dinero como para pagar y comprar cada película libro o canción que quisiera. ¿Qué hay que hacer entonces?.

Que paguen quienes tengan que pagar

Ahora, la gente no cobra por toda la mierda de publicidad que meten en la TV, la prensa, y en estos últimos días hasta en el cine, y no se diga ya en las páginas web, y en estos días toda la porquería de los partidos políticos no obstante ahí nos tienen viéndola gratis, escuchando a cada segundo del día o la noche, el silbido de un comercial del gobierno.
De toda esa publicidad que ven nuestros ojos, y escuchan nuestros oídos, alguien se beneficia. Hay que ver las ganancias del creador de Megaupload.
La publicidad hace a la gente comprar productos que no se necesitan, ver programas y películas vacías, y endeudarnos con créditos de intereses estratosféricos por productos que no son lo que se pensaba.
La publicidad paga por todo, es la moneda de cambio del internet de estos días, google, facebook, en apariencia gratuitos, viven de ello, de la publicidad que nos cuelan cada segundo del día.

En un mundo perfecto

De los 200 pesos que me quedan libres cada quincena (ya quisiera ver eso), yo como un honrado ciudadano de un mundo justo, distribuiría ese dinero entre, la o las películas que más me gustaron, la canción o canciones que más me gustaron, y el o los libros que mas me gustaron que me hicieron mas culto (ojo, de ahí viene la palabra cultura).
De esa manera no malgastaría ese dinero en un perfume Armani a un precio exorbitante sólo porque el o la modelo gana millones por pasar de un lado a otro de la pantalla, o posando para una lente, porqué los actores y modelos no pueden vivir de manera modesta, como los escritores y músicos o como toda la demás gente.
En algún momento de la historia humana, alguien se dio cuenta que las vanidades son caras, y que la publicidad y la mercadotecnia son la herramienta que motiva ese atributo.
Según una de las definiciones en el diccionario de la Real Academia Española, <cultura es el conjunto de conocimientos que permite a alguien desarrollar su juicio crítico>. Tener juicio para distinguir lo vale y retribuirle y lo que no, desecharlo.
Si el internet no es la democracia donde la mayoría gana por una vez en la historia, que más da que se retureza Enrique Iglesias y Rianha, por una canción que no vale nada y que nos restregan todo el días hasta por donde no, sólo porque paga radio y televisión para que la reproduzcan miles de veces al día.

Legado a la humanidad

Y qué si alguien quiere oír la séptima sinfonía de beetoven y se conecta a la Red y la baja de algún sitio por allá en Europa del este, qué si alguien gana dinero, ilegal o no, por esa descarga, ¿No es eso robar?, pero como dicen por ahí en una película (que vi en el cine, lo aclaro) “¿que pasa con robar lo robado?”, porqué habría que pagar por escuchar música de un autor que murió en la ruina y algún desaprensivo que de alguna manera se hizo con los “derechos” y aún gana dinero con ello.
Pienso que es justo que si yo no puedo ganar millones haciendo un comercial de perfumes, ni escribir una sinfonía que guste a todos los millones del planeta y legarla, ni puedo comprar toda la música, ni todas las cintas, dvds, bluray que puedo ver, ni todos los libros que puedo leer, tendría que haber una manera decir que no a quien viene y los ofrece.

Las 1000 libros y las 1000 películas que hay que leer y ver antes de morir

Qué si yo pongo en un disco las más de 600 sinfonías de mozart y la regalo a un niño para que a lo largo de su vida escuche a uno de los genios cuya obra debería ser ya patrimonio de la humanidad así como debería de haber muchos más libros digitales con derechos libres.
Siendo justos, cada humano que nace debería por tener ese disco u otros con buena música como un regalo… cada niño o joven debería tener acceso a todos los libros de los grandes autores clásicos ya muertos, pero no, las editoriales siguen cobrando por la venta de libros de autores ya muertos. Las casas disqueras siguen cobrando por discos de antaño y versiones de canciones de hace muchos años, a mi criterio eso también es robar.

Preservar

Con todo esto no digo que Megaupload o Pirate bay u otros tengan más razón que Warner o Sony, ni soy nadie para decirlo, pero pienso que debe existir una manera en la que los materiales que valen la pena y los que no, tengan las retribuciones que merecen, y eso cada día es más una realidad gracias a la Red, eso es preservar la cultura, no en los archivos de las disqueras, ni en las bóvedas de los banqueros, ni el las galerías de los ricos coleccionistas de arte que mejor lugar que en la mente de cada persona de este mundo.
Así sea.

Italia…

De Italia a 2 años…

Nunca me cansaré de escribir sobre esta niña, cada día tiene algo nuevo, de pronto me la encuentro cantando una canción extraña, la encuentro usando con corrección la palabra «tampoco», o que conoce el significado de «huellas», la escucho contar (de pronto hasta en inglés), la veo pintar, leer y escribir a todas horas del día o de la madrugada, vestir a sus muñecos porque hace frío. Experimentando con una energía inagotable.

Está bien, puede parecer que exagero, puse leer y escribir, y sé que apenas tiene dos años pasados, no veo que sea una niña superdotada ni nada de eso, me da gusto que sea una niña de lo más normal y vea letras escritas y haga como que lee, que le gusten los libros aunque sea por imitación, o los rayones y manchas que hace, yo los imagine como grandes obras artísticas, y en realidad para mí lo son.

Decía Picasso que todos los niños son genios, que el problema es como hacer para que cuando crezcan sigan siéndolo. Así que esta pequeña seguirá ese largo camino de crecer y veremos que rumbo toma.

A veces me hace recordar el niño que fui y sé que con el tiempo me hará recordar al joven que se está yendo y con suerte obtendré la explicación de porqué soy como soy.

Lo que quiero evitar es que pierda esa chispa, esas ganas de hacer cosas, de sorprenderse con todo, las ganas de jugar y aunque a veces estoy muy cansado para jugar con ella, para levantarme a «espantar» el mono que la asusta, para, en las madrugadas darle agua y llevarla al baño, hacer el esfuerzo lo vale, además no estoy solo contra ese pequeño huracán.

Llagará el día (y no se la pondré fácil) en que descubra que Yo y Lorena no lo sabemos todo, que tendrá que seguir su búsqueda en otro lado y hacer su propia vida y me dará gusto ver las huellas que irá dejando, y sabré que eso tampoco lo hice mal.